Por algunos años, estaba en búsqueda de trabajo desesperadamente. Me sentía tan descontento y rechazado por todo lo que tenía que ver con el empleo porque o no calificaba o nunca recibía respuestas.
Era frustrante. Cada vez que visitaba un sitio que según decía “estamos en búsqueda de empleados,” me rechazaban inmediatamente.
Llegó un punto en donde pensé que la búsqueda del trabajo ya no tenía caso, si solamente me iban a rechazar, incluso cuando apliqué para ser cajero en Mcdonalds.
Sin embargo, estoy agradecido por el trabajo que he conseguido ahora. Es un buen empleo por el momento mientras estoy en el colegio, incluso coopera con mis horarios de la escuela. Pero tomó tantas entrevistas, trabajos temporales y demasiadas llamadas de rechazo para que llegue aquí.
Es más, muchas personas no son tan afortunadas en recibir la oportunidad de empleo.
Algunos trabajos piden que los estudiantes tengan horarios fijos y demandan la atención entera. Hice un cuestionario en Google Forms sobre las experiencias que estudiantes han tenido mientras buscan trabajo en el colegio.
Entre las 24 respuestas, 66.7% de estudiantes están empleados actualmente y aproximadamente 75% solamente están en la escuela. La pregunta primaria que pregunté fue, “¿cuáles obstáculos encontraste mientras buscabas trabajo?”
Las respuestas más comunes fueron, conflictos con horarios y la falta de calificaciones.
Parece que esto siempre es el problema. se que cuando yo estaba buscando trabajo, era común que me rechacen o que me ignoren por mi horario en el colegio. Me di cuenta que tengo una oportunidad mejor en conseguir una entrevista si mi disponibilidad es más amplia.
Lo mismo es cierto con el hecho de calificación, algunos trabajos dicen que no requieren experiencia o calificaciones. Pero cuando aplicas, te ignoran completamente.
Cual es el punto en decir “no se necesita calificaciones” o, “entrenamiento pagado” si no es lo que están buscando?
Quisiera que la preparatoria realmente prepare a sus estudiantes para el mundo real en vez de enseñarnos cosas que olvidaremos en tres meses. En mis días de preparatoria, no había mucha variedad de programas o oportunidades, como en el colegio, para encontrar trabajos. Al menos si estábas en el programa CART (El Centro para Investigación y la Tecnología) pero solo algunos estudiantes pudieron meterse en eso.
No niego que la educación es importante, la escuela llega antes de cualquier cosa. Sin alguna forma de educación, uno no puede conseguir un futuro mejor o un trabajo que pague bien. Pero me hubiera gustado tener esa ayuda en tener un trabajo que me prepare para la realidad. Preparándome para el rechazo y la decepción, después pudiera sentirme bien sabiendo que podré encontrar un trabajo que necesite mis habilidades.
Antes de la preparatoria, tener un trabajo no era algo en lo que me enfoque. Y después te das cuenta del valor del dinero y lo que el mundo real requiere. Algunos estudiantes aprenden esto en un semestre de economía doméstica. La tomé en la secundaria y la única cosa que recuerdo de esa experiencia fue atrapando a mi amigo en un cajón con una cuchara.
Pero siendo un adulto joven, a punto de ser un adulto, la situación es escalofriante.
Pienso mucho en mis padres, quienes están atascados en trabajos donde no son realmente felices. Y me han dicho constantemente que esperan que no termine como ellos. Eso me pone muy nervioso por mi futuro. Muy poca gente tiene éxito haciendo lo que aman. Los demás son olvidados, terminan siendo miserables y eso da miedo. Conseguir un trabajo ahora es simplemente para sobrevivir en una economía cara donde los ricos se mantienen ricos y los pobres son arrojados hacia el fondo.
Mi papá me ha dicho que, “solamente porque alguien dice que no, no significa que nadie más te necesita. En algún momento serás el “si” de alguien.”
Y después de muchas entrevistas y bastantes rechazos, por fin estoy trabajando en algo que realmente me gusta. Y trabaja con mis horarios, me da tiempo para hacer mis tareas de la escuela. Pero hay consecuencias cuando tienes un trabajo, llega un punto donde se vuelve demasiado cansado. En mi cuestionario de Google Forms hice la pregunta, “¿cómo encuentras el equilibrio entre la escuela y el trabajo?”
De los que participaron en el estudio, 42.1% dijeron que si pudieron encontrar un equilibrio, mientras el otro 26.3% fue inaplicable, 5.2% indicaron que no podían y 0.1% no respondieron. Sin embargo, me di cuenta de algo importante, la falta de tiempo social que tenemos.
La vida se vuelve tan ocupada que no tenemos tiempo para pasar tiempo con amigos o la familia quienes nos importan. Es como un ciclo extraño. Si tienes un trabajo mientras estás en la escuela, eres capaz de hacer lo que tu quieras, pero no tienes tiempo para tus amigos. En comparación, si no tienes un trabajo, tienes tiempo libre con tus amigos pero no tienes el presupuesto para divertirte en ciertas actividades.
Los trabajos no tienen que ser divertidos. Si tienes suerte, encontrarás un trabajo que aguantas o que te guste. O tal vez el trabajo te hace buen dinero y puedes tener una vivienda confortable. Pero existe un miedo del día a día que terminarás atascado para siempre. Siento que esa es una gran preocupación de los jóvenes en el día presente. ¿Cómo será nuestro futuro en 5 años?